Poemas de Ataol Behramoğlu

 

SONETO (LAS CASAS DE PARÍS)

 

 

 

Las casas en París son de barniz
sobre todo en la tarde soleada
París, como una doncella desmayada
cae en el caliente suelo de adoquín…

 

Luego el primer rumor, las primeras personas
que se convertirán en un sueño nocturno…
París, extraña, intrincada, incomprensible,
París, ciega, sin corazón, monstruosa…

 

Y la Eiffel, sin más que un puñado de seso
por encima de un cuerpo de dragón…
viene y se va con adormilados ojos serenos…

 

Ahógate, si quieres, de amor o de angustia;
Grita, si quieres, enloquece, muérete …
Siempre te superará esta ciudad …

 

(1973)

 

 

 

NI LLUVIA NI POEMAS

 

 

 

Le pregunto  a mi amor
—¿Has leído Reportaje al pie de la horca?
Es nuestra vida.
La noche llena el interior
con sus estrellas.
En tres provincias
hay estado de excepción.
La expresión «fiscal militar»
ocupa su lugar
como expresión cotidiana
en el diccionario de nuestras vidas.
Amores esposados
en Sudamérica.
Me muero
de tristeza.
Todo el mundo cuenta su vida.
Madres enloquecidas
Edificios en ruinas
Lo que vivimos
es una juventud
hecha pedazos.
¿No ves que
nuestra vida está sangrando?

 

—¿Has leído Reportaje al pie de la horca?
De la tortura
y la esperanza
brota la poesía.
Busco
las palabras de la aurora
que vendarán las heridas de mi alma
«Tristeza al final
de las gruesas novelas revolucionarias»
Nuestra vida como novela
gruesa
revolucionaria

 

—¿Has leído Reportaje al pie de la horca?
Querida,
un beso.
Si no me vuelvo ajeno al
del mar que cruzo
cada día
Si pudiera contar
todas las vidas…
De pie ante la muerte
un hombre
lee
su vida   ./..
en un único verso.
Asfixia
enloquecedora
Nostalgia
enloquecedora
Días y Praga
y trenes
y la pena que
me arrastra.
Encadenan los días
Amores esposados
Sudamérica
Ché Guevara.
Lo recuerdo todo
cada cosa.
Gruesas
novelas revolucionarias.
La vida
me llena.
Como una casa en ruinas
llena el cielo.

 

—¿Has leído Reportaje al pie de la horca?
En Praga
tengo un amor.
Y la Segunda Guerra Mundial
y los tanques
y mis manos
cuando te tocaron por última vez
Saber
que ya
no estarás;
Saber
que no estaremos
porque
no hay salida de aquí.
Estampidos de disparos
una primavera.
Ah, palomas voladoras
de mi corazón.
Ah, sensación
de vivir una posibilidad.
Ah, amor
que digiero dentro de mí.
Mi amor
de Praga.
Te recuerdo
en las noches nevadas
y la Lituania que visitamos
bajo la lluvia.
Viendo  ./..
«Kanal»
todas esas bellezas eslavas
y eslovacas.
Mujeres
de voz ronca.
Amargura ortodoxa
leyendo «Tabaco»
y a Fučik.
Está escrita
con nuestra sangre
la epopeya de la vida
En la tierra
están las huellas
de nuestros labios.
Y en los frentes
donde nos quedamos helados
cartas
arrugadas
y que no llegaron
a destino.
Guerra
y tristeza
y poemas
Una terrible
ansia de amor.
Como si me ahogara
del amor que siento
por la humanidad
Como si me estallara
el corazón
Imágenes
que he llevado a lo largo de trenes
pasando
por las ciudades
y pueblos y lejanas
sensaciones
que hay en la mirada
de cada ser humano
El ansia de hacer contigo
el amor para siempre
y consciente de ser varón
y tan contemporáneo y comprensible
como la carta
que le dejó a su mujer
un hombre que iba
a la horca.
Triste como
el pan.
Como la poesía
de Vaptsarov.   ./..
Amor mío,
mi corazón extendiéndose
miles de kilómetros
y mis lágrimas
y el querer
llegar a todo.
Tragarme
todas las novelas
vivir
todos los amores
no consolarán
mi corazón
contemporáneo y tambaleante.
Ni la lluvia…
Ni la poesía…
(1974)

 

 

 

 

 

SOMETIDO A ASEDIO

 

 

 

Sometido a asedio, tengo que tomar
decisiones que afectarán a mi vida.
No vivo el amor en recónditos jardines
sino en habitaciones vacilantes.

 

En cuanto encuentro el verso más bello
me estropea la idea el ruido de un claxon
En la mente, reflexiones sobre mi vida
y una mancha de grasa en el pantalón.

 

Un anuncio de sonrisa estúpida y pertinaz
se embute al final de una película sentimental
el amor pierde su sentido
el rencor se vuelve resbaladizo.

 

El niño que ríe en mi interior
convive con un cadáver infantil
hemos olvidado cómo alegrarnos y entristecernos
sin aditivos.

 

En tiempos había algo llamado cielo
infinito, vasto, azul
ahora nubes apáticas
pasan como perros enfermos

 

Y el mar ha sido encadenado con rompeolas
en vías de convertirse en agua estancada
la ciénaga que llevamos dentro
vierte su veneno en la naturaleza…

 

Sometido a asedio, tengo que tomar
decisiones que afectarán a mi vida.
Pero nada podrá secar
el amor que hecho reverdecer en la tierra estéril.

 

(1978)

 

 

 

ODA A LAS VACAS

 

He visto tantas vacas en mi vida
que tenía que dedicarles un poema
vacas, que se tumban despatarradas en los prados
vacas, que rumian meditando sin fin

 

Si le digo a una mujer que tiene ojos de vaca
lo toma por insulto, se ofende
sin embargo, qué hermosos son los enormes ojos
los ojos de mirada triste de las vacas

 

Al regresar del prado al atardecer
son tan distintas de los otros animales
ni alboroto, ni bullicio, ni cascabeleos
puede que a veces un profundo «mu»…

 

Son símbolo de la inmutabilidad del infinito
que este poema sea un homenaje a las vacas
a su sublime solemnidad
y a la confianza en su estabilidad…

 

(octubre de 1986)

 

 

 

VERANO

 

 

 

Te amo, y no pretendo decir nada
         al decirlo
este olor de verano lo recuerdo de otro tiempo
este sabor de verano lo conozco, amor sudoroso
conozco las ingles y las sienes sudorosas

 

Me examino, me sueno,el veranopasa
Como si el verano no fuera a pasar, sonidos suspendidos en el aire
alcanzan su objetivo perezosamente
El profundo sueño del verano, el verano de la modorra
de los picores, de partir hacia climas lejanos

 

El verano se parece a una flor grande y extraña
(he recordado ese símil)
la luna está desnuda
(y este otro)
el verano calienta las lápidas
y la sangre de las lagartijas

 

De mi pelo brotan hierbas y lagartijas
Verano, jardines descuidados
piscinas descuidadas
los días de verano no tengo pelos en la lengua
pero me crece en ella la ortiga del amor

 

Creo palabras de seda; si vas a venir, ven
las palabras se cansan y se quedan a mitad de camino
amor y palabras escritas en el terciopelo de la noche

 

El verano me atrae a su profundo lecho
lloro y renazco
el verano es un sueño de muerte y un impulso nocturno
nos envuelven frescas estrellas

 

Las palabras se sumergen en aguas profundas y vuelven a surgir
así es el verano y así es la novela

 

El verano me hiere

 

(junio de 1990)

 

 

 

DIEZ POEMAS DE SEPARACIÓN

 

 

 

I

 

Nos separamos en la vida y en la muerte
dos cuerpos se separaron
se separaron nuestros corazones
se separaron nuestras voces una de otra

 

Se separaron nuestras manos
nuestros olores
nuestro despertar en la misma cama
nuestras risas
nuestras lágrimas
se separaron nuestros sueños unos de otros

 

La noche del alma
lo cubrió todo de repente

 

 

 

II

 

No solo por nosotros dos
lo lamento por la vida entera
en las fotografías
el recuerdo de una noche

 

Estoy tan solo que
es como si no estuviera
se disuelve el antiguo yo
y no puedo ser uno nuevo

 

La pena, con pasos afables
viene a enroscarse en mi corazón
la vida está tranquila
como las casas al amanecer

 

Como si no hubiera ocurrido nada
simplemente ya no estamos los dos
ya no existe lo que éramos,
en tus sueños el mar sigue ahí
y los árboles, igual

 

 

 

III

 

La mañana de mayo canta en mi corazón
y suenan las alas de un pájaro
las alas de un pájaro suenan
y el llanto de un niño

 

Cavo en el corazón de la tierra
brotan flores y una mañana de mayo
cavo en el amor
brotan dolores y palabras sin pronunciar

 

La vida me desafía
y yo vuelvo a tratar de apoderarme de ella
le tiendo trampas
la apunto con mi tirachinas

 

Las mañanas de mayo soy un niño
sin foguear y con la belleza de la primera edad
desafío a la vida
con mis poemas aún sin escribir

 

 

 

IV

 

Serás otra aunque no quieras
cuando otra piel toque la tuya
cuando tu cuerpo se encuentre con otro
cuando tu aliento se mezcle con otro

 

Serás otra aunque no quieras
durmiendo de noche o en medio del día
te estremecerás con la sensación repentina
de vacilar al borde de un precipicio

 

Serás otra aunque no quieras
tu ropa, llevando el rastro de mis miradas
prenda a prenda irá agotando su existencia
cambiarán de sitio un armario, una maceta en tu ventana

 

Serás otra aunque no quieras
una arruga en tus labios después de mí
un tono en tu risa que no conozco
y tus ojos empezando ya a olvidarme

 

Y entonces, entonces, serás otra por fin

 

 

 

V

 

Donde terminan las palabras
el corazón comienza a hablarse solo
Un hombre clava un ataúd
en la negrura de la madrugada

 

La poesía
comienza cuando me hablo solo
como una vela
que empieza a arder con un chisporroteo

 

Por la mañana
es como si estuviera en mi infancia
si no me muevo
es como si la vida también se detuviera

 

Un amor que se pierde
es como la infancia perdida
en verano, a mediodía, la amargura está desnuda
y sin sombra

 

 

 

VI

 

El pasado,
si se recuerda, es el presente,
o bien se arranca y se tira
como una hoja de un cuaderno

 

Lo que se arranca y se tira
puede ser un corazón agitado
o bien una noche de verano
en que las estrellas agonizan

 

 

 

VII

 

Tengo nostalgia detrás de la lengua
y una confusa oración
los recuerdos asfixiados
no te traerán a mí

 

Los poemas no te traerán a mí
ni las migajas que quedan del verano
si pudiera ser piedra,
sueño o viento…

 

Volverá la primavera
puede que vuelva a ser feliz
se parecerá a la canción de un mudo
la felicidad después de ti

 

 

 

VIII

 

Como uno se acostumbra a la muerte
el amor que nos tenemos pasará
No tenemos un único rostro
ni un único futuro

 

Al dormirme en una caja de piedra
lo que me hiere en la oscuridad
es pensar que puedo estar sin ella

 

Es de noche, la voz húmeda del viento
cuando me llena los ojos la oscuridad
llama al ángel del rencor

 

 

 

IX

 

Buenas muertes, señor mío, una medianoche en que sangra el viento
buenas muertes, en las aguas más profundas

 

Que se enrojezcan las flores de las acacias y se espesen las rosas
a las primaveras pasadas y futuras, buenas muertes

 

Vendrá el otoño destartalado, húmedas las cuencas de los ojos,
la lluvia pasará por la calle, descalza

 

Buenas muertes, señor mío, que le sellen la boca y los ojos
porque en otoño se muere bien con sus putrefacciones

 

 

 

X

 

Tengo el corazón roto como esquirlas de cristal
cierro las páginas de un libro envejecido
penas polvorientas, sabor a sonrisa apagada

 

Cierro las páginas de una vida envejecida
cierro las puertas de un mar pasado

 

 

 

(noviembre de 1994-diciembre de 1998)

 

 

 

Traducción de Rafael Carpintero Ortega

 

Ataol Behramoğlu nació en Estambul, Turquía en 1942. Se graduó en Lengua y Literatura Rusa en la Universidad de Ankara. Sus primeros dos poemarios salieron a la luz en 1965 y 1970 respectivamente. Entre 1970 y 1974 vivió en París, Londres y Moscú.  Unos fragmentos de su poema “One Day For Sure” fueron editados por Aragon en Les Letters Françaises. En 1982 recibió de la Union de Escritores Afro-Asiáticos el Premio “Lotus”. Actualmente, es profesor de lengua y literatura rusa y tiene una columna de literatura y política en el diario turco “Cumhuriyet”. Además de ser ampliamente conocido como poeta y escritor, también es un eminente traductor de la poesía de Puskin y Lermontov, y de las obras teatrales de Chekov. Su poesía ha sido traducida en muchos idiomas y ha recibido numerosos premios a nivel nacional e internacional: Lotus Prize (1982), Pouchkine Prize (2008), Mihai Eminescu Prize (2016), European Homer Prize (2016), European Academy of Sciences Arts and Literature’s membership (2018), Honorary Doctorate Degree of Constantin Stere University (Moldavia, 2018).

 

 

Semblanza y fotografía proporcionadas por Ataol Behramoğlu.

 

 

 

 

 

Rafael Carpintero nació en Córdoba (España) en 1962. Es profesor en el departamento de filología española en la Universidad de Estambul y traductor. Entre sus trabajos de traducción destaca la obra del premio Nobel de literatura 2006, Orhan Pamuk.

 

 

Semblanza y fotografías proporcionadas por Rafael Carpintero.

 

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